Como es costumbre en fin de semana,de muy temprano iniciamos nuestras andaduras,esta vez por tierras hispano-portuguesas,no antes de haber degustado unas tostadas con un reconfortante café.
Desde el albergue de Valencia de Alcantara iniciamos una subida costante por la sierra en un dia gris amenazando lluvia,que no tardaría mucho en hacernos compaña durante casi todo el trayecto.
La cota mas alta de nuestro trayecto cercano a los 25km, ha sido de algo mas de 700 metros,
Caminos blandos rodeados por un colorido de lo mas variopinto que podeis imaginar,tonos verdes,azulones,amarillos con un olor intenso amplificado por la tierra mojada,charla animada,respiración entrecortada,caminar acelerado,conversación sin fin.
La lluvia hizo su aparición,primero unas gotas que no la dimos importancia pero como si de un niño enrabietado fuese al ver que no la haciamos demasiado caso apretó con todas sus ganas,chubasqueros presentes,paraguas domingueros, risas de agradecimiento.
Disfrutar de una caminata con mas de 400 personas en un dìa lluvioso por el corazón de la sierra de Jola es una experiencia muy dificil de imaginar,para esas personas que no saben lo diferente que puede llegar a ser un domingo al quedarse en su casa,estas experiencias son la sal de la vida.
Cuantos pensamientos afloran con el caminar, cuantos rincones agradables regalan momentos irrepetibles a tus ojos,cuantos olores olvidados te llenan de recuerdos.
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